viernes, 2 de agosto de 2013

LINKMEX 03.08.13 De los horizontes y verticales enfrente de cada quien.



Ayer hablé de pura casualidad de un tema, el de las carreras de cada quién en el sentido de los horizontes que están frente a nosotros en donde nos encontramos, los que vemos, y lo que significa eso en los días de LinkedIn.

Y de ahí quiero poner la metáfora de horizontes, que todo mundo sabe, lo que nos referimos a lo que tenemos ante nosotros, como si fuera el territorio a recorrer. 

Hacia adelante y nunca retroceder, o hacia los lados, en el llamado salto colateral... y de pronto subimos un escalón, o un piso y vemos otras cosas. El horizonte lo subimos en la escalera organizacional al subir un nivel.

Y entramos a lo vertical. A lo que se suma esa visión del horizonte.

No quiero ser obvio poniendo ejemplos, pero no queda más que ilustrar lo que estoy pensando. 

¿En qué momento eso, podemos hablar CON los Powers-That-Be? ¿Los de a mero arriba?

Esos que fueron creciendo sin que nadie los detuviera, en carrera vertiginosa hacia arriba, con padrino y sin padrino, con capital, o sin capital, con inteligencia, intuición, agallas y con suerte y con arrojo, con buenas decisiones y con gran sentido de la oportunidad, que hablan otros idiomas, que tienen otras ideas, otras visiones más allá de las que nosotros tenemos, de las que estamos obligados a tener... ellos no subieron por la escalera corporativa sino que fue por el elevador corporativo express, mas bien.

Esa gente no compra Expansión, bueno, sí la compra, pero también tienen accesos a reportes que valen su peso en oro, mucho más concentrados con información más precisa, mas al día relativa, y decisiva, a sus intereses particulares.

El punto es que esas personas no hablan con la raza working class hero, no por nada, sino porque su tiempo vale proporcionalmente mas que 300 working class heroes.

Pero aquí está el tema, hay que ver que ahora las cosas han cambiado, ya no es lo mismo que hace años, las monolitos están desapareciendo, las intocables, las grandes empresas van a desaparecer, se convertirán en pequeñas grandes empresas, mas para proyectos temporales ad hoc, bueno, sí seguirán existiendo los grandes castillos inexpugnables, pero tendrán muchísimas mas empresas satélites alrededor... y esa será una manera de guardar distancia.

Los grandes magnates tal vez tengan sólo una oficinita igual que la del de sistemas, eso permitirá, tal vez, insisto, en estar en contacto con lo que sucede a su alrededor, o tal vez sigan con la influencia de sus antecesores con sus grandes oficinas de inmensos espacios, con sus salas de juntas para veinte personas, etc. con esa idea como dije arriba, de guardar esa distancia psicológica, emocional, social.

El punto es que la mayoría de nosotros no manejamos presupuestos de 100 millones de pesos, a lo mucho de una centésima de eso. Y ellos sí.

Bueno, todo eso, es estar viendo como aspectos de la empresa que definitivo, uno que hace tal vez presupuestos de 1,000,000 de pesos, de pronto no hará los que los Powers-That-Be hacen de 100 millones, hay que irse por etapas.

Y bueno, ellos, los pocos, están allá. Acá estamos los muchos. Quizá algunos de nosotros seamos originales, seamos buenos y por obra del destino o de una gran broma cósmica nunca pudimos demostrar lo que tenemos dentro. O cuando llegamos hacerlo en esa otra metáfora de la vida como es la de las sillas musicales cósmicas también, nos quitaron la última que quedaba y nos sacaron del juego de manera darwiniana.

De pronto con las corrientes de pensamiento gringas sale el tema del Discurso del Elevador, algunos lo preparamos, algunos hasta nos lo sabemos, y tenemos algo que decir al gran talento que está allá arriba en la verticalidad. Y se puede dar o no. Pero la idea ahí está. El elevador y la gran única oportunidad.

A lo que voy es que LinkedIn puede reducir esos niveles de esa verticalidad hacia nuestro horizonte

Nos permitirá hacer esas distancias hacia lo lejos, hacia arriba, elásticas, flexibles, lo contrario a como estaba antes, y tendremos contactos, y serán buenos, lo sé. Algo ocurrirá en esos encuentros que antes por la horizontalidad y la verticalidad no podían existir. O eran muy complejos. Pero que con el elevador y su discurso...


Y el problema se reducirá a... ten algo importante qué decir. Y que lo piensas decir, y que lo digas... no te arrepentirás...


Así la horizontalidad,la verticalidad, se manifestarán, sí, pero no serán tan determinantes, lo que importará será lo de "que sí tengas algo importante que decir...".


Pasen excelente día.

1 comentario:

  1. Excelente tema Luis, muy acertado, tienes mucha razón.

    Esos espacios se están acortando y con los 6 grados famosos de separación (que esa es otra historia), lo comprobamos día a día. LinkedIn nos da esa valiosa oportunidad de utilizar ese elevador que los Powers-That-Be utilizan a diario. Como me decía un amigo siempre: "hay que estar listos para cuando salte la liebre..."

    ¡Saludos!

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